Juegos tradicionales – Las Chapas

Juegos tradicionales – Las Chapas

Qué felices fuimos jugando, ¿cómo se nos puede llegar a olvidar a los adultos la alegría que da jugar? ¿conoces los juegos antiguos? hoy te traigo otro, tan divertido como el que te presenté el mes pasado:

https://educaciondivertida.com/juegos-tradicionales-la-maza/


EDAD:

A partir de 7 años. (con niños más pequeños también se puede intentar en función de su destreza manual y haciendo adaptaciones de las reglas.)

LOCALIZACIÓN:

Patios, preferiblemente al aire libre, aunque nos valdría cualquier espacio, cubierto o no, que tenga superficie lisa (esto último es conveniente pero no indispensable)

JUGADORES:

Mínimo 2, máximo 6-8 por partida, pero se pueden realizar varias partidas a la vez si el espacio lo permite. En función del espacio disponible, se pueden realizar varios escenarios de juego para que participe toda la clase a la vez.

MATERIAL:

Chapas de botellas de cristal (cerveza, refrescos…). Las mejores son las totalmente planas en la base.

Conviene utilizar chapas sin deformar (al abrir la botella sin cuidado se suele doblar un poco la chapa por el centro, donde apoya el abridor). Siempre se pueden alisar a base de raspar con frecuencia contra superficies duras y lisas (bordillos, paredes, suelos de cemento..)

SITUACIÓN INICIAL:

Dependiendo del tipo de juego:
Carrera en bordillos: se parte de una esquina o una raya marcada con tiza, ladrillo… cada jugador, según el orden establecido con anterioridad, tira su chapa golpeándola con el dedo índice o corazón percutiendo con apoyo del pulgar.

Cada turno puede consistir en uno, dos o tres disparos consecutivos (esto último sobre todo en largas distancias).

Carrera en circuito y Lanzanientos: Se parte de la línea de salida.

Al círculo y al cuadrado: Disparo libre desde cualquier punto fuera del perímetro de la figura geométrica.

OBJETIVO:

En los juegos de carreras, llegar el primero a la meta o bien, llegar a la meta con el mayor número de puntos (conseguidos en los pasos intermedios o metas volantes).

En el lanzamiento, recorrer la máxima distancia desde el punto de salida.
Al círculo y al cuadrado, sacar el mayor número de chapas fuera de la superficie marcada.

En todos los juegos se puede jugar a “la verdad”, llevándose el ganador las chapas de los perdedores, y a “la mentira” donde, una vez terminado el juego, cada jugador conserva sus chapas.

DESARROLLO:

Cada jugador procede a realizar las tiradas correspondientes en su turno y respetando las reglas de cada juego hasta finalizar el mismo.

En las carreras se puede finalizar cuando hay un ganador, o bien, esperar a que todos lleguen a la meta para establecer una clasificación.

TEMPORIZACIÓN:

Son juegos relativamente rápidos (unos pocos minutos).

En casos de recorridos muy largos (circuitos) o jugadores con poca experiencia se puede fijar un tiempo, unos 10 minutos, y gana el que haya llegado más lejos.

REGLAS:

Bordillos y circuitos: Una vez decidido si cada jugador tira una, dos o tres veces consecutivas:

– no vale salirse del circuito; en caso de salida del circuito se vuelve a tirar desde posición donde se efectuó el tiro. En caso de ser la última, vuelve a dicha posición y se queda sin tirar hasta el próximo turno.
– si saco del circuito a uno o más contrincantes, estos se colocarán en el punto desde donde yo he tirado.
– si al tirar saco a un contrincante y, a su vez, me salgo yo, dejo la ficha del contrario donde estaba y yo me vuelvo a mi posición de tiro.
– si mi chapa queda montada encima de otra y se me ha acabado el tiro, puedo optar por dejarla encima para entorpecer o beneficiarme del tiro del contrario, o bien retirarla momentáneamente para que el contrincante tire y, acto seguido, depositarla en el espacio que ocupaba esperando mi turno.
– si con mi chapa desplazo otra chapa y las dos cruzan una meta volante o la meta final, se gana la puntuación la chapa que ha cruzado en primer lugar.
– se puede acordar si se cambia o no de chapa durante la partida.

Al círculo y/o al cuadrado:

– Siempre se tira desde el exterior de la figura
– Si saco alguna chapa, sigo tirando
– El juego termina cuando no quedan chapas dentro de la figura
– Si la chapa con que he tirado se queda dentro de la figura, la dejo ahí y pasa a ser otra chapa más a sacar

VARIANTES:

– Carrera en bordillos
– Carrera en circuito
– Lanzamientos
– Al círculo
– Al cuadrado

OBSERVACIONES:

Como ya he mencionado anteriormente, las chapas favoritas eran las totalmente planas.

Todas las chapas se solían decorar colocando en su interior recortes de nuestro interés: futbolistas, ciclistas, superhéroes, protagonistas del cómic, coches….

Esas fotos se protegían y sujetaban con trozos de cristal previamente moldeados por nosotros con cantos rodados. Íbamos a buscar cristales rotos con tamaño algo mayor que la chapa, que nos servía de molde, e íbamos limando los bordes del cristal presionando con los cantos rodados (del tamaño de una patata mediana o pequeña) hasta conseguir que entrara en el interior de la chapa, la cual podía ajustarse cerrando su corona.

Este proceso en sí era tan entretenido o más que el juego propiamente dicho, hasta el punto que solíamos tener cristales de reserva ya tallados. El día que encontrábamos cristales apropiados lo dedicábamos a preparar una buena remesa.

Según el grosor del cristal, se conseguían chapas más o menos pesadas, adecuadas para los distintos tipos de tiros o preferencias personales.

Curiosamente no recuerdo cortes con cristal por estos motivos, aunque si eran frecuentes las roturas de los mismos durante la talla (más frecuentes cuanto más fino era el cristal) lo que obligaba a empezar de nuevo.

Cuando no disponíamos de cristal y queríamos aumentar el peso de la chapa, la rellenábamos con piel de naranja (cortada presionando con la chapa por la parte blanca y dejando a la vista el color naranja) y, si necesitábamos aún más peso, recurríamos a rellenar la chapa con plastilina hasta conseguir el objetivo deseado.

Francisco

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