Profesor tecnológico, un educador del siglo XXI

Profesor tecnológico, un educador del siglo XXI

 

Interesante artículo de prensa y radio (Onda Madrid), presentado por Olga Codejón, con motivo del día del maestro, 27 de noviembre de 2013.

La evolución del profesor nos hace afrontar nuevos retos que nos vienen dados por las nuevas tecnologías de la información y comunicación.

Esta evolución «no debe consistir únicamente en cambiar el papel por el ordenador, sino utilizar de forma diferente las distintas herramientas que ofrece la web 2.0»

Desde la experiencia, el profesor debe cambiar el enfoque pedagógico y metodológico, dirigido a aumentar la participación del alumnado en el proceso del aprendizaje».

Al final del artículo se propone un decálogo para que los docentes integren las tecnologías los centros educativos de manera efectiva.

 

Profesor tecnológico, un educador del siglo XXI Madrid, 26 de noviembre de 2013
Olga Codejón Iruela

Es sorprendente cómo la tecnología ha cambiado el mundo y ha dado lugar a nuevas formas de educación que nunca habríamos pensado.

Los docentes del siglo XXI deben afrontar un reto que le viene dado por las nuevas tecnologías de la información y comunicación.

El educador tradicional debe iniciar el camino de la transformación hacia lo que llamamos un docente 2.0. Mientras que el docente tradicional da sus clases en el mismo lugar y utiliza el mismo material didáctico, el docente 2.0 va más allá del espacio físico, enseña de manera informal, investiga, comparte, diseña sus propios contenidos didácticos y favorece las múltiples manifestaciones de la inteligencia. A principios de la década de este siglo las aulas tradicionales se están transformando con la inclusión de las tecnologías de la información y la comunicación.

Ser un docente 2.0, no es solo utilizar tecnología en el aula. El cambio no debe consistir únicamente en cambiar el papel por el ordenador, sino en utilizar de forma diferente las distintas herramientas que nos ofrece la web 2.0. Sin embargo, esta es la realidad de lo que ha sucedido en muchos centros escolares.

La diferencia entre la capacitación de los docentes y las herramientas disponibles han desembocado en una intromisión y no en una inclusión de la tecnología en el aula.

Hoy en día, todavía existe mucha resistencia al cambio por gran parte de los docentes, ya que están presentes muchos temores que deben ser tenidos en cuenta. Puedo hablar desde mi experiencia como docente, que he encontrado por parte de los profesores, preocupación, ganas de aprender y desorientación, entre otras sensaciones.

Muchas veces señalamos los desaciertos de los docentes sin comprender las dificultades que implica la incorporación de las nuevas tecnologías en la educación. Por ejemplo, la dificultad que tienen muchas veces los docentes cuando se enfrentan a un ordenador del cual no son coetáneos. Hay que tener en cuenta la desventaja que poseen frente a los alumnos.

El cambio que se pretende, no es menor.
Necesitamos desarrollar competencias que, como docentes, nos dotarán de un mejor dominio de esas tecnologías, aunque puedan parecernos un desafío. Entre los retos a los que nos enfrentamos, nos encontramos con un cambio de enfoque pedagógico y metodológico dirigido a aumentar la participación del alumnado en el proceso de aprendizaje.

El papel del docente desde el punto de vista de las recientes perspectivas sobre las nuevas metodologías de la enseñanza ha crecido progresivamente. Al contrario de lo que pueda parecer, el profesor es ahora mucho más activo de lo que era antes. Es decir, la antípoda de lo que pasaba con el profesor empleado en una metodología tradicional. El nuevo profesor, el profesor comunicativo intenta que los alumnos asuman mayor responsabilidad en su proceso de aprendizaje, debe reflexionar más sobre las actividades que propone y sobre todo cómo y por qué las propone. El docente 2.0 es un docente con un objetivo comunicativo que quiere que sus alumnos hagan casos reales desde sus actividades, que quiere que trabajen en grupo y que interactúen con sus compañeros en general y con el espacio virtual en particular.

El profesor se convierte en un guía y potencia el uso de las nuevas tecnologías como enseñanza en el proceso de explorar aplicaciones y espacios que ofrece Internet. Por ejemplo puede integrar estas tecnologías de forma efectiva con una participación en línea creando grupos temáticos, ofreciendo a los alumnos recursos a consultar y guiando la búsqueda de los temas de clase y motivando a los alumnos a través del desarrollo de proyectos e iniciativas educativas.

La metodología utilizada en la UNIR, desde las asignaturas que imparto en los Grado de Infantil y Primaria, se basa en la educación personalizada, desde unos recursos didácticos de interés para la comprensión de la realidad educativa que se da en un centro escolar y desde unas herramientas de comunicación que dan acceso a las clases presenciales. Desde las cuales proyecto las presentaciones de la sesión establecida, y a través del chat, mantenemos un diálogo bidireccional donde resolvemos dudas de lo explicado y donde los alumnos aportan más información o experiencias personales sobre el tema tratado enriqueciendo la exposición del mismo. Es importante esta interacción, no solo entre profesor-alumno, sino también con el resto de los compañeros que asisten a la clase, ya que compartimos las vivencias y opiniones del grupo y se ofrece al alumno más recursos para consultar y gestionar su propio aprendizaje.

Esto se complementa con otra herramienta, los foros, que día a día nos mantienen en contacto directo y que tienen una doble finalidad. La resolución de dudas, al igual que las clases presenciales; y también la propuesta de actividades donde el trabajo cooperativo y la participación de los alumnos son el centro del aprendizaje.

Esta forma de trabajar y gracias a la flexibilidad que tienen los alumnos en la gestión del tiempo y de las actividades y trabajos que realizan a lo largo de la evaluación continua, crea un ambiente de participación y colaboración que promueve el aprendizaje activo, se convierte en un facilitador del conocimiento, nos ofrece la oportunidad de ser guías en la búsqueda e investigación de los temas de clase ya que se hace un uso efectivo de las herramientas que proporciona la Web 2.0.

En estos momentos, para mí, y cada vez para más docentes, no son tan importantes los
contenidos en sí mismos como los elementos mediante los cuales accedemos, los creamos, los seleccionamos o los vinculamos. Hasta ahora no creo que la incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación hayan contribuido mucho a optimizar este aspecto en las aulas, pero en la medida que la Web 2.0 se vaya desarrollando sí tendremos una buena oportunidad de hacerlo.
Es importante que los docentes nos demos cuenta de que las herramientas Web 2.0 son una configuración pedagógica diferente a la tradicional; invitará a una reflexión, a la experimentación y al esfuerzo ante lo nuevo y desconocido. Merecerá la pena cuando alcancemos unos entornos de aprendizaje motivador, eficiente y constructivo.

Estamos en el siglo XXI, nuestros alumnos no pueden aprender como lo hicimos nosotros, tenemos nuevos y potentes recursos que combinados con nuevas metodologías hacen más enriquecedor el aprendizaje por eso presentamos un decálogo, para que los docentes integren las tecnologías de una manera efectiva.

1.- Participo de la nueva economía del conocimiento y la cultura de la participación.
2.- Creo mi propio ritmo de aprendizaje informal.
3.- Me renuevo constantemente a través de máquinas digitales y desde las experiencias educativas innovadoras.
4.- Perfecciono mi actividad colaborando en proyectos innovadores en cualquier momento y desde cualquier lugar.
5.- Las personas que me siguen y sigo en las redes, favorecen diariamente el proceso cognitivo social.
6.- Al compartir mis ideas con los demás recibo un valor añadido.
7.- Es más lo que recibo que lo que produzco.
8.- Con mi identidad digital llego a lugares nunca imaginados.
9.- Mis ideas están en constante movimiento y evolución.
10.- Con mi aprendizaje permanente me entusiasma aumentar las posibilidades de los demás.

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