Una vez que el alumno/a se encuentra en el nivel 3 de la recta numérica (cadena rompible), es capaz de empezar a contar a partir de cualquier número.
Dentro de las actividades de conteo existe un grupo de ellas que requieren un material muy sencillo, con el cual se inician a la simulación y representación. En este grupo se encuentra la recta numérica.
La recta numérica es de los primeros materiales de matemáticas que aparecieron en las aulas. El hecho de que se pueda emplear también como unidad de medida aumenta su polivalencia.
Interesa que cada niño tenga la suya, y que, además haya una general para toda la clase, a la vista y al alcance de todos los niños. En infantil de 3 años debe abarcar hasta el número 10, en 4 hasta el 30 o 40 y en 5 hasta el 100.
Debe ser lo suficientemente grande para que pueda ser bien vista, y distinguidos sus números, por todos los niños, estén sentados más cerca o más lejos de ella.
Será útil en una gran variedad de ejercicios: contar progresiva y regresivamente, cálculo mental, contar salteado progresiva y regresivamente, iniciación a las operaciones básicas, etc. Pintada en el suelo posibilita ejercicios muy atractivos y estimulantes para el alumnado que se está iniciando, perfeccionando o corrigiendo el aprendizaje de la numeración.
Recorriéndola con los dedos aprende a separar adecuadamente cada uno de los números, a comenzar a contar desde el número que se le ordene o haya elegido, a contar determinados números a partir de uno concreto, a hacerlo en sentido progresivo o regresivo, o a hacerlo de forma salteada.
Por tanto, recta numérica es el soporte fundamental para que el alumno se afiance y progrese en cada uno de los niveles de dominio de la secuencia numérica.
«Desarrollo y mejora de la inteligencia matemática en Educación Infantil.
Ed. Wolters Kluwer.
LoLi Mendoza
Colegio de Linares