La mejor manera de aprender es realizar un aprendizaje significativo, y una de las experiencias más positivas es a través del aprendizaje práctico. Este aprendizaje se convierte en aún más positivo cuando nuestros padres participan en la tarea. Los niños se sienten involucrados en la actividad y la hacen suya. Se muestran felices de tener a sus padres cerca en el proceso educativo.
Potenciar el consumo de fruta en edades tempranas es algo muy necesario en nuestro mundo actual. Manipularla, jugar y crear con ella ayuda a acercarse al alumno a su consumo.
En las fotos que presentamos, una de nuestras madres se ofreció para trabajar con la fruta, y utilizando piezas de pera y uvas, los niños crearon un cuerpo espino muy divertido.
A través de esta actividad, los niños pudieron manipular la fruta y probarla, para algunos algo nuevo en su vida.
Os dejamos una serie de fotografías que ilustran el momento, y os animamos a que probéis en casa a que vuestros hijos disfruten del consumo de frutas y verduras de manera lúdica, diseñando cualquier otro animal o figura divertida.
Materiales Necesarios:
Una pera.
Uvas negras para el cuerpo, ojos y nariz.
Palillos de dientes.