Educar con pasión
Si tenemos en cuenta lo que significa la palabra pasión, podemos definirla como una emoción intensa que engloba el entusiasmo o deseo por
algo. El término también se aplica a menudo a un vivo interés o admiración por una propuesta, causa, actividad, y otros. Se dice que a una persona le apasiona algo cuando establece una fuerte afinidad.
Si queremos educar a nuestros alumnos, hemos de poner pasión en aquello que hacemos, pues si no hay pasión ¿cómo vamos a sacar lo mejor que llevan dentro cada uno de nuestros alumnos?Sin vocación, sin amor al oficio, sin el deseo inconmensurable de servirle al alumno, de propiciar un cambio sui generis en su mentalidad, y en catalizar profundas mutaciones en su visión particular de ubicarse en el contexto –en el mundo circundante-, de interpretarlo y comunicarlo, todo sería en vano y todas las acciones del profesor quedarían desterradas en el exilio, inasibles en la realidad.El profesor debe manifestarle amor al arte que practica: enseñar, motivar, cambiar mentalidades en pro de la sociedad. Sentirlo, apasionarse por su labor docente, investigativa, de comunicación permanente con sus alumnos.
En este artículo se nos da una serie de pistas para educar con pasión.
http://ined21.com/aprendizaje-basado-en-la-pasion/
Margarita Avilés García